Miomas experiencia

¿Cómo me di cuenta de que tenía miomas?

 


Hay un tema del que casi no hablamos entre mujeres, a pesar de que hasta el 70% de nosotras podremos tenerlos en algún momento de la vida: los miomas uterinos.


Son una causa frecuente de infertilidad, sangrados abundantes y dolor. Y aunque son muy comunes, la información clara es sorprendentemente escasa.

Hace un año y cuatro meses me retiraron siete miomas. Cuando compartí mi experiencia, me escribieron con dudas que yo también tuve en su momento. Es una etapa confusa, llena de miedo y decisiones. Por eso quise crear este blog: para darte claridad, acompañarte y ayudarte a entender mejor qué esperar.

¿Qué son los miomas uterinos?

Los miomas (o fibromas) son tumores benignos que crecen en el útero.
Pueden aparecer dentro de la pared uterina, hacia la cavidad interna o incluso hacia afuera, dependiendo del tipo.

Aunque muchos no causan síntomas, otros pueden generar:

  • Sangrados menstruales abundantes

  • Dolor o presión pélvica

  • Inflamación abdominal

  • Dolor durante las relaciones

  • Problemas para lograr o mantener un embarazo

  • Sangrado entre periodos

Los síntomas dependen muchísimo del tamaño, número y ubicación de cada mioma.

¿Cómo se diagnostican?

La forma más común de diagnosticarlos es mediante ultrasonido pélvico, especialmente el endovaginal, porque da mayor detalle.
En algunos casos también se usa:

  • Ultrasonido abdominal

  • Resonancia magnética (cuando se necesita mayor precisión)

El diagnóstico lo realiza generalmente una ginecóloga o ginecólogo.

¿Todos los miomas necesitan cirugía?

No.
De hecho, muchos miomas solo se vigilan porque no causan síntomas o crecen muy lentamente.

Las opciones de tratamiento pueden incluir:

  • Manejo expectante (solo monitoreo)

  • Tratamiento hormonal

  • Técnicas para disminuir el flujo sanguíneo hacia el mioma

  • Miomectomía (retirar miomas conservando el útero)

  • Cirugía laparoscópica

  • Cirugía abierta (cuando son grandes o muy numerosos)

  • Histerectomía (retirar el útero) en casos seleccionados

La elección depende de tu edad, síntomas, deseos de fertilidad, tamaño y número de miomas.
Por eso cada caso es extremadamente personal.

Mi caso: cuando los miomas empiezan a afectar tu vida

Yo tenía siete miomas grandes. En mi caso, no me causaban dolor extremo, pero sí estaban afectando directamente mi fertilidad.

Y aquí quiero hacer una pausa:
Cuando dices en voz alta que tienes miomas, todo el mundo tiene una opinión, una historia o un consejo. Aunque se agradece, puede confundirte muchísimo.
Lo que realmente necesitas es seguir tu propio caso, tus estudios y las recomendaciones de tu especialista.

¿Cuándo buscar una segunda opinión?

Siempre es buena idea si:

  • Te recomendaron cirugía

  • Los miomas están creciendo rápido

  • Tienes dudas sobre el tipo de procedimiento

  • Algo no te suena del todo claro

No para desconfiar, sino para sentirte segura antes de tomar una decisión importante.

Preparación antes de la cirugía

Si ya tienes fecha, seguramente estás nerviosa. Es normal.

Algo que sí te recomiendo, y que muchos médicos también lo sugieren, es llegar a la cirugía lo más desinflamada posible.
Esto puede ayudar a que tu cuerpo esté en mejor estado para recuperarse.

Algunas pautas generales (no sustituyen indicaciones médicas):

  • Reduce ultraprocesados, frituras y refrescos

  • Evita exceso de azúcar, lácteos y gluten si te inflaman

  • Duerme lo más que puedas

  • Evita el estrés (sé que es difícil antes de una cirugía)

  • Mantén una alimentación simple y antiinflamatoria

Mi cirugía duró dos horas y media. El día de la cirugía no sentí dolor, pero sí sentí muchísimos nervios. Ten cerca a alguien de confianza. No revises WhatsApps de trabajo (yo sí lo hice y lo aprendí por las malas).

El primer día después de la cirugía

Mi cirugía fue una miomectomía abierta, muy similar a una cesárea.

Pasé una noche en el hospital.
En mi caso personal, lo que más me dolió no fue la herida… sino las calcetas de compresión.
Como mujer con lipedema, la presión me resultó muy incómoda.

La recuperación en casa: lo que nadie te explica bien

Aquí empieza la parte más intensa porque ya no tienes enfermeras ni monitoreo constante.

¿Cuánto dura la recuperación?

Depende del tipo de cirugía, pero en una miomectomía abierta suele ser:

  • 2 a 6 semanas de recuperación total

  • La primer semana es la más difícil

Mi recuperación completa fue de un mes.

¿Qué esperar la primera semana?

  • Bañarte es lo más complicado, hazlo sentada

  • Muévete un poquito para estimular digestión, pero nada de esfuerzos

  • No manejar, no cargar peso, no estar mucho tiempo parada

  • Prepara comida con anticipación o pide ayuda

  • Y lo más importante: ve despacio

Signos de alarma (consulta inmediata)

Estos sí son importantes:

  • Fiebre

  • Sangrado muy abundante

  • Dolor intenso que no mejora con medicamentos

  • Enrojecimiento o supuración en la herida

Si algo te preocupa: consulta, no te quedes con la duda.

¿Qué dieta se recomienda al inicio?

La primera semana, normalmente te sugieren una dieta blanda baja en fibra, porque:

  • Tu intestino está inflamado

  • Estás tomando antibióticos

  • Hay que evitar cualquier esfuerzo abdominal

Incluye alimentos suaves como pan blanco, arroz, verduras cocidas, pollo, sopas y suficiente hidratación. Tu nutrióloga te dará indicaciones específicas.

La cicatriz

Entiendo el miedo.
En mi caso, la cicatriz quedó muy baja y casi invisible con la ropa. No tuve infecciones y sanó muy bien. Cada cuerpo cicatriza distinto, pero con cuidados y paciencia puede sanar muy bonito.

¿Valió la pena?

Sí.
Muchísimo.

Pasar por una cirugía nunca es fácil. Da miedo, agota, remueve emociones y te obliga a pausar la vida. Pero hoy me siento mucho mejor, más fuerte y con mi fertilidad de vuelta a la normalidad.

Si tú estás pasando por esto:
no estás sola, tómalo paso a paso y confía en lo que tu cuerpo y tu médico te van indicando.

Aquí estoy para acompañarte, y nos vemos en el siguiente blog para seguir hablando de nutrición antiinflamatoria flexible y salud femenina. 💛

*Este contenido es educativo y refleja mi experiencia como nutrióloga. No reemplaza la consulta, diagnóstico o tratamiento médico profesional. Cada cuerpo es único; antes de hacer cambios en tu alimentación o estilo de vida, especialmente si tienes SOP, lipedema u otras condiciones de salud, consulta a un profesional de confianza.

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